Desde el año 2000 el Instituto IRMA ha brindado atención psico-terapéutica a mujeres y hombres que han vivido la triste experiencia de una o más pérdidas gestacionales.
Gracias a la confianza de miles de personas que se han atendido en IRMA, hemos obtenido una gran riqueza en la comprensión de la problemática que viven mujeres y hombres en esta situación, por lo que sentimos el privilegio y el compromiso de compartir los conocimientos que de viva voz nos han transmitido nuestros pacientes. Esto nos han motivado a estudiar e investigar más profundamente sobre los efectos de esta experiencia en la persona, familia y sociedad con el principal objetivo de dar una mejor atención a cada una de las personas que acuden a IRMA solicitando ayuda.
Sin embargo, consideramos que tenemos también la responsabilidad de compartir este aprendizaje en los ámbitos médicos, educativos, formativos, de asistencia social, así como de la salud mental y en asociaciones afines que brindan atención a personas con pérdidas gestacionales o en riesgo de vivirlas, para dar a conocer la necesidad de validar el dolor y las complicaciones psicológicas a nivel personal y familiar que pueden darse ante esta situación y así puedan brindar una atención más asertiva desde su área de especialización.
En IRMA hemos formado y capacitado desde el año 2000 a personas que han querido brindar acompañamiento terapéutico en IRMA o en otros espacios, lo mismo a personas que trabajan en asociaciones que atienden a mujeres, así como a profesionales independientes. También se ha brindado capacitación y formación a personas del ámbito educativo, religioso-pastoral y médico.
Desde el año 2020 hemos desarrollado un proyecto de formación y capacitación para llegar a más lugares por medio de servicios a distancia gracias a la tecnología, que, sumada a la triste circunstancia de la pandemia, ha facilitado la modalidad de estudio on-line.
Todo esto nos llevó a formar una nueva entidad, que hemos llamado SOPHIA, una asociación que parte de la experiencia de IRMA, pero con fuerza e impulso propio para brindar un mejor y más amplio servicio de formación que no limite o reste la acción de atención especializada de IRMA, sino que sume con su propia identidad, misión y visión a la construcción de una cultura que reconozca, estudie, investigue y forme nuevas generaciones más íntegras y más humanas en la atención de personas en situación de pérdida gestacional.